Me llamo Beatriz y me encanta la navidad, bien podría vivir dentro de una película de Hallmark sin problemas. Me encanta el lado cursi, festivo y hasta mágico de la navidad y de verdad disfruto todas mis pequeñas tradiciones.
Para mi navidad empieza los primeros días de diciembre, cuando mi mamá cambiaba los platos blancos por la vajilla roja de monos de nieve y de la carpeta de CDs salía el disco amarillo con “Christmas Classics” (aunque en esta nueva era digital se transformó en “Alexa, pon Música de Navidad de Michael Bublé“). Navidad es poner el arbolito el primer fin de semana de diciembre mientras escuchamos el Cascanueces de Tchaikovsky (otro de los éxitos de la carpeta de CDs aunque este disco en especial me lo regalo mi abuela) y tomamos chocolate caliente. Navidad es el viaje de Christmas shopping a San Diego, con una lista larguisimaaaaaa y la satisfacción de saber que encontré el regalo perfecto para todos, porque no es por nada pero soy muy buena dando regalos, si no pregúntenle a David Benito.
Navidad es ver el cascanueces, en Tijuana, el teatro de la ciudad de Ensenada, en San diego o ya si no se arma de perdida el DVD de la versión con Macaulay Culkin y el New york city ballet, que también está en la carpeta de los CDs.
Navidad es esperar a que sea 17 de diciembre para volar a Culiacán y alcanzar a festejar el cumpleaños de mi abuela, es tomar el vuelo Tijuana – Culiacán con los personajes mas folclóricos que te puedas imaginar y llegar platicando lo que viste en el avión.
Navidad es la cena en casa de mis abuelos, es el pavo, la gelatina de vino tinto, la sopa de navidad y lo que se le ocurra a mi tía Claudia cocinar ese año (aunque mi favorito por siempre sera la lasagna verde). Navidad es abrir los regalos empezando por el menor de la familia y esa competencia no oficial de quien le da el mejor regalo a los niños. Navidad es la mejor época del año.
Me considero una persona muy afortunada por la familia que tengo, por todos los recuerdos y tradiciones que tengo asociados a esta época del año. Cuando trabaja en la oficina y les platicaba mis planes de navidad siempre me decían que mis navidades eran “envidiables” o “de película” y la verdad es que si, mis navidades siempre han sido bien fregonas.
Y luego vino el 2018, emocionalmente no estaba en mi punto mas alto, como lo habrán leído en los post pasados, y ese año iba a ser la primera navidad que pasaría sin mis papás y mi hermana, porque ellos se iban a Culiacán y a mi me tocaba quedarme a pasarla con mis suegros. Ese ha sido uno de los cambios mas grandes que he enfrentado, y es que todavía me cuesta mucho aceptar las cosas que no van de acuerdo al plan. 27 años de tradiciones iban a cambiar e iba a pasar una navidad diferente, y mi mente no podía con eso. Llegó el punto en el que estaba de verdad emberrinchada, como niña de 7 años que le cancelaron la fiesta, y todo porque yo no quería que las cosas cambiaran. Viendo en retrospectiva, y ya que se me pasó el berrinche, me di cuenta que la navidad del 2018 fue muy buena, tuve todas las tradiciones hasta antes de volar a Culiacán, empece el 24 de diciembre en casa de mis compadres, luego fuimos a cenar con mis suegros (y hasta hice la gelatina de vino tinto) y terminamos en casa de los galletos, en su tradicional torneo de juegos navideños que empezó a media noche y termino a las 4:00 am. ¿Fue diferente? Si. ¿Extrañaste a tu familia? ¡Muchísimo! ¿Fue malo? Para nada, fue una muy buena navidad, fue la navidad en la que crecí un poquito mas como persona, en la que me tuve que enfrentar a la Beatriz cuadrada que se aferra a que todo este en orden y bajo control y decirle que se relajara, que no era el fin del mundo y que las cosas pueden ser diferente y aun así estar bien y disfrutarlas.
Ahora, si el 2018 fue la navidad de cambios, el 2019 dijo “quítate que ahí te voy“. Desde que llegamos a Seattle en Octubre supe que aunque nos “tocaba” Navidad en Culiacán este año no se iba a poder, para empezar estamos muy lejos, aun no terminamos de instalarnos aquí, Jorge no sabe si va a descansar unos días o no… total vi todas mis tradiciones salir volando por la ventana. Me solté llorando porque nos íbamos a quedar solos y después de que lo saque de mi sistema me trate de convencer para entrar en el espíritu navideño, Alexa play christmas carols, abrí la única caja con decoraciones navideñas que me traje de Ensenada y fue cuando me encontré con este cascanueces.

No estoy segura de cuando llegó a mis manos, hace unos cinco años, tal vez mas. Lo teníamos en casa de mis papás, y me lo llevé a mi casa cuando me casé. Me gusta tener un cascanueces en navidad, me hace sentir como Clara bajo ese enorme árbol, y aunque en la vida real nunca baile el papel de Clara (aunque fui la reina de los ratones) de niña siempre me gustaba imaginarme dentro de esa historia.
Lo primero que note al sacarlo de la caja es que la espada ya se había dado por vencida y todas las decoraciones se estaban cayendo poco a poco, me di cuenta de que nunca fui fan de los pantalones verdes y de que necesitaba un cambio. Cambio la palabra que se a convertido en mi némesis en esta fecha, y la misma palabra que le iba a traer nueva vida al viejo cascanueces.
Me tomé el tiempo para quitarle todos los detalles, lijarlo y cubrirlo con una capa de pintura blanca, mientras pensaba en el cambio que iba a enfrentar yo misma, en como este año iba a ser el mas diferente de todos. Abandoné el proyecto unas semanas porque se me quitaron las ganas de la Navidad y no quería hacer nada ya, me tomó 2 días poner el arbolito y ni siquiera escuché el cascanueces mientras lo hacia y ya estaba decidida a abandonar el cascanueces y la navidad cuando viaje a Ensenada por unos días a principios de diciembre.
Fui a casa de mis papás y ya estaba el arbolito puesto y la vajilla roja en la mesa, tuvimos pre navidad con todo y regalos, y me puse a pensar que nada en realidad es tan extremista como “este año no vas a tener nada” y aunque esta navidad sera muy diferente aun así, todavía puedo tener esas tradiciones que hacen la navidad importante, y es sentir a la familia cerca aunque estemos muy lejos.
Con las pilas recargadas regrese a Seattle dispuesta a terminar mi proyecto, compré pintura, cabello sintético y hasta un ratón de madera para hacer un set y puse manos a la obra.

Todos en mi familia vamos a vivir una navidad diferente este año, mi abuelo falleció a principios de Septiembre y va a ser nuestra primera navidad sin él ¡Y como lo vamos a extrañar! Pero todos vamos a aprender a vivir con el cambio, atesorar esos recuerdos, momentos y tradiciones que no van a volver, a crear nuevas tradiciones que van a ir cambiando conforme la familia va cambiando y a mantener una cosa bien clara, no importa donde estemos, la familia siempre esta cerca, ya sea sentados en la mesa cenando o a través de una videollamada. Navidad es estar en familia y decirles lo mucho que los amas cada vez que puedas.
Así como el cascanueces yo también cambie este año, aprendí a estar emocionada por una navidad diferente y lejos de casa, a iniciar nuevas tradiciones con mi familia, Jorge, y de paso a dar gracias por vivir en esta época de las videollamadas que hacen todo mas fácil. Claro que me estoy muriendo por estar en Culiacán, y claro que los extraño muchísimo, pero el 2019 va a ser mi primera navidad con la familia que inicie al casarme con Jorge, el y yo contra el mundo. Me emociona saber que tradiciones vamos a iniciar juntos, y se que cuando podamos regresar a pasar Navidad a Culiacán va a ser aun mas especial porque siempre es muy bonito regresar a casa.
Les deseo que pasen una muy feliz Navidad con su familia, que los abracen, digan lo mucho que los quieren y que recuerden con mucho amor a los que ya no están. Deseo que se emocionen por el mejor día del año, ya sea que lo pasen con toda la familia, con su pareja o sólitos, espero que sepan que en Navidad la familia siempre esta contigo.
Yo me estoy arreglando para ir a la Opera de Seattle a ver el cascanueces con el Pacific Northwest Company (tienes sus ventajas vivir aquí) y mañana iré a cenar con mi esposo para empezar nuestra nueva tradición navideña y sinceramente me estoy muriendo porque ya estén todos en casa de mi abuela e iniciar la videollamada para verlos a todos juntos.
Alexa call my mom.
No sabía que era tan importante tu lasagna verde … Pero prometo hacerla cuando vengas, por lo pronto hoy hornearé para mañana unos filetes minognes pero con la receta de tu cucu del lomo… Y por supuesto que extrañamos tus galletitas … abrazos a ambos y que tal que allá ir hace frío empiezas una de jugo de manzana caliente con unas buenas varas de canela… Y si le ponemos un roncito?
LikeLiked by 1 person
Gracias por esta hermosa tarjeta de Navidad. Y por todo. Feliz Navidad.
LikeLike